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CORINTA DEVOCIÓN
Luis Alberto Marín González
Presidente de la Real y Muy Ilustre Archicofradía de
Nuestro Señor Jesucristo Resucitado
Estante de la Santa Mujer Verónica
La cofradía hermana del
Santísimo Cristo de la Caridad
celebra este año el vigésimo
aniversario de su fundación y desde
la archicofradía del Resucitado
queremos unirnos a esta entrañable
onomástica. Y ello porque son muchos
los lazos de unión entre ambas
cofradías. Ya al principio, en el
germen de lo que había de ser la
cofradía corinta, el apoyo de un
grupo de mayordomos del Resucitado
coadyuvo decisivamente a que
aquellos primeros titubeantes pasos culminaran con la fundación
de lo que hoy es toda una gozosa realidad en nuestra Semana
Santa.
Pero es que además, estos lazos de unión han perdurado en el
tiempo y hoy, veinte años después, es fácil encontrar entre los
estantes, penitentes, mayordomos y mantillas de la Caridad, otros
tantos que también los son de la cofradía de Santa Eulalia.
Nazarenos y nazarenas, en sí, que disfrutan de la solemne
conmemoración de los misterios dolorosos de Nuestro Señor en la
noche del Sábado de Pasión y de la jubilosa manifestación de gozo
y de esperanza en la mañana del Domingo de Pascua.
Y es que sí algo ha cuidado y cuida con devoción la cofradía
corinta es su puesta en escena. Conscientes de la necesidad de
acentuar el sentido cristiano que ha de alumbrar a un desfile
procesional, la cofradía ha dedicado no pocos esfuerzos a cuidar
con exquisitez los delicados exhornos florales en los tronos, los
muy seleccionados acompañamientos musicales, la apuesta
decidida por la cera y el rigor necesario para dotar a las