Página 13 - ReviSTA01

Versión de HTML Básico

13
He aquí lo que me parece más importante de dicha homilía:
1. Reforzar la fe:
“Queridas Hermandades, la piedad popular, de la que sois una manifestación importante, es un tesoro que
tiene la Iglesia, y que los obispos latinoamericanos han definido como una espiritualidad, una mística, que
es un «espacio de encuentro con Jesucristo»… Acudid siempre a Cristo, fuente inagotable, reforzad vuestra
fe, cuidando la formación espiritual, la oración personal y comunitaria, la liturgia. A lo largo de los siglos,
las Hermandades han sido fragua de santidad de muchos que han vivido con sencillez una relación intensa
con el Señor. Caminad con decisión hacia la santidad; no os conforméis con una vida cristiana mediocre,
sino que vuestra pertenencia (a la Hermandad) sea un estímulo, ante todo para vosotros, para amar más a
Jesucristo”.
2. Lo esencial:
“En la Iglesia naciente fue necesario inmediatamente discernir lo que era esencial para ser cristianos, para
seguir a Cristo, y lo que no lo era. Los Apóstoles y los ancianos tuvieron una reunión importante en
Jerusalén, un primer «concilio» sobre este tema, a causa de los problemas que habían surgido después de
que el Evangelio hubiera sido predicado a los gentiles, a los no judíos. Fue una ocasión providencial para
comprender mejor qué es lo esencial, es decir, creer en Jesucristo, muerto y resucitado por nuestros