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La virtud de la Caridad se representa como una matrona que está acogiendo y dando de mamar a
diversos niños, que suelen ser tres, simbolizando a las tres Virtudes Teologales: Fe, Esperanza y Caridad.
Las tres Virtudes aparecen representadas por tanto en la Caridad, significando que ninguna existiría sin esta
última (el amor). Referente al tema de los niños, siempre se ha dicho en el caso de la Matrona del Almudí
que acoge a un niño extraño y da de lado al propio (
y esto se suele achacar al carácter entregado de los
murcianos),
pero esto es un craso error de interpretación: ningún niño se identifica como propio o extraño,
incluso esa mujer que representa siempre a la Caridad no tiene por qué ser madre de esos niños,
simplemente es un símbolo de su acogida caritativa, amorosa, a varias personas indefensas representadas en
niños.
Pero Murcia cuenta con otras dos bellísimas representaciones de la Caridad que pasan casi
desapercibidas para el pueblo en general: en la imponente imafronte barroca de nuestra Catedral,
curiosamente la Caridad aparece representada dos veces. Sobre las puertas laterales de la imafronte, en sus
frontones curvos, aparecen las virtudes. La Fe (
mujer velada sosteniendo una custodia
) y la Esperanza
(
mujer con un ancla
) sobre la Puerta de San Juan Bautista o del Obispo; la Oración (
mujer con un rosario
entre las manos
) y la Caridad sobre la Puerta de San José o de la Ciudad. Son pequeñas esculturas llenas de
movimiento barroco y exquisitos modelados y composición.