Página 59 - revista corregida final total

Versión de HTML Básico

Rosario Corinto 04
59
ILUSTRE COFRADÍA DE MARÍA
SANTISÍMA DE LOS DOLORES Y
SANTOS PASOS
Ángel Sánchez Prieto
Presidente Cofradía
Las manifestaciones de piedad del
pueblo han acompañado al hombre desde
siempre. La religiosidad y liturgia mariana;
su culto, ritos, cantos y gestos son las
expresiones más auténticas que alimentan al
cristiano. María es modelo ejemplar, ocupa
un lugar especial por su estrecha relación en
la obra de Cristo, la encontramos presente en
los diferentes momentos del año litúrgico,
unida con un lazo indivisible a la obra
salvífica de su hijo.
La primera Cofradía llamada de los
Dolores y Santos Pasos de Nº Señor Jesucristo
predicaba la espiritualidad franciscana, que
se dedicaba a la penitencia y meditación del
Vía Crucis. Este Vía Crucis datado en 1686, es un caminar por los Pasos del Señor camino de la Cruz,
recordando las estaciones de dolor, escuchando los textos que ilustran aquellas escenas y te mueven
al arrepentimiento.
La aprobación episcopal de ésta hermandad se remonta a un 8 de agosto de 1689. Como
devoción principal cada viernes se rezaba el Vía Crucis y los 7 Dolores de la Virgen, saliendo de
la Parroquial de San Miguel y llegando a la Ermita del Calvario. Este ejercicio se hacía en forma de
procesión. Junto a esta práctica semanal
se establecía la festividad anual de los
Dolores de la Virgen. La Hermandad
debía de ser de 72 hermanos varones de
los cuales 13 eran sacerdotes. En 1786 se
acuerda permitir la admisión de mujeres.
Debido a las desamortizaciones
y otros acontecimientos de divisiones
políticas civiles en nuestro país, trajo
la desaparición de personas físicas que
mantenían y hacían posible la cofradía
y el cambio de mentalidad religiosa fue
poco a poco haciendo mella hasta la total