Junta Gestora y Primeras elecciones

Tras la dimisión del presidente D. Domingo Martínez Jiménez, el día 5 de julio del año 2000, debido a una insostenible situación interna económica en el seno de la cofradía, el Sr. Obispo de la Diócesis D. Manuel Ureña Pastor, decreta el nombramiento de una Junta Gestora presidida por D. Antonio José García Romero, con unos fines encomendados muy concretos en cuanto a auditoria y actualización de las cuentas de la cofradía, y para que a la terminación de su cometido convocase elecciones en el seno de la cofradía.

Realmente la cofradía no debiera haber crecido más respecto al número de hermandades, puesto que sus preceptos constitucionales solo pretendían incluir en el cortejo los cinco misterios dolorosos del rosario, pero la realidad económica también implicaba la necesidad de gestionar de forma optima, unas nuevas hermandades  para poder solventar el enorme problema económico creado, fruto de una gestión improcedente, tal y como quedó claramente establecido en la auditoria e informes realizados.

Por todo ello, el día 7 de abril de 2001, se incorporaba la Hermandad de San Juan, cuyo autor es el escultor cartagenero Manuel Ardil Pagán y su trono fue realizado por los Hermanos Noguera Pastor de Espinardo. También ese año la cofradía nombró al Cuerpo de la Policía Local de Murcia, Mayordomos de Honor y desde esa misma fecha viene desfilando Escolta de Gala junto al Santísimo Cristo de la Caridad, lo que le otorga gran solemnidad al desfile de nuestro titular por las calles de Murcia.

Por fin, el 10 de junio de 2001 se celebraban las primeras elecciones en el seno de la cofradía, tras once meses de intenso trabajo y de enormes dificultades, se comienza a reescribir la historia con renglones menos torcidos. Solo concurre una candidatura a las elecciones, la de D. Antonio José García Romero, la cual es ratificada de inmediato por el obispo y el 27 de junio de 2001, aprovechando la efemérides del aniversario de la cofradía tomaría posesión la nueva junta de gobierno.

Existían varios retos inmediatos para la nueva Junta de Gobierno, cambiar las constituciones de la cofradía, haciéndolas más iguales, más justas y más coherentes, había que pensar en el X aniversario de la cofradía y lo más importante, solventar una enorme parte del problema económico que aun se arrastraba puesto que la hermandad nueva había contribuido a subsanar  solo un tercio del problema y era imprescindible afrontar este reto. En estos años se incorporaron 2 hermandades nuevas junto a la de San Juan y con ello casi 400 nuevos hermanos corintos, lo que definitivamente hizo que se lograra solucionar los problemas  económicos y pudiéramos vivir un X aniversario digno y sin sobresaltos.

El 18 de febrero de 2003 fueron aprobadas definitivamente las nuevas constituciones de la Cofradía de la Caridad por el Obispo de la Diócesis,  el 12 de abril de 2003 desfilaban por vez primera en nuestra procesión las dos nuevas y definitivas hermandades que completaban el camino del calvario de Nuestro Padre Jesús Nazareno y San Juan. La primera de ellas, la Santa Mujer Verónica, magnífica imagen realizada por el escultor de Los Ramos, José Hernández Navarro que desfila sobre trono de Juan Cascales Martínez y la segunda de las hermandades, María Dolorosa imagen de Francisco Salzillo que realizara en 1735 y que provisionalmente se incorporaba a nuestro desfile procesional, y que lo haría sobre trono de Manuel Ángel Lorente Montoya.

En la recogida del desfile por fin pudimos contemplar frente a frente a María Dolorosa esperando a que su hijo retorne a su casa y en la recoleta Plaza de Santa Catalina se interpretaron unas piezas dedicadas a la virgen y también a Cristo, para inmediatamente entrar en la iglesia a los sones del himno de España.

Ese año y dentro de los actos de X Aniversario de la cofradía los cofrades de la Caridad pudimos tener la satisfacción de contemplar y venerar como se merece en su capilla y gracias a la desinteresada aportación de los estantes de María Dolorosa un altar de cultos definitivo realizado por el tronista Manuel Ángel Lorente Montoya, siendo bendecido dicho altar el día 28 de marzo de 2003 y celebrando un concierto conmemorativo por tal motivo.